Salmorejo
El salmorejo es un plato español que se ha convertido en una delicia culinaria en todo el mundo. Según la historia, el origen del salmorejo se remonta al siglo XVII, donde se optimizó una "sopa de ajo". Sin embargo, otros estudios sugieren que el salmorejo tal como se conoce hoy en día se originó a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, después de la llegada de los tomates a España. Independientemente de su origen, este plato se ha convertido en un plato típico de Andalucía, especialmente en la ciudad de Córdoba, donde se celebra un festival de salmorejo cada año.
La preparación del salmorejo es bastante sencilla y requiere pocos ingredientes. Los ingredientes principales son tomates, pan, aceite de oliva y ajo. Los tomates se pelan y se mezclan con el pan, el aceite de oliva y el ajo hasta que se forma una crema suave y espesa. Se sirve frío y se puede adornar con trozos de jamón ibérico, huevo duro y un chorrito de aceite de oliva.
Esta es la receta tradicional para hacer el rico salmorejo cordobés o andaluz casero. Un plato refrescante hecho a base de tomates naturales y que resulta perfecto para servir en verano cuando el calor aprieta.
- 1 kg tomates (bien maduros)
- 3 huevos cocidos
- 100 g jamón serrano
- 1 diente de ajo
- 150 g pan de masa dura (mejor del día anterior)
- 6 tbsp vinagre
- 125 ml aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Triturar los tomates
Pelamos los tomates, troceamos y los colocamos en un bol grande junto con el diente de ajo, previamente pelado y troceado.
Añadimos una cucharadita de sal y trituramos con una batidora eléctrica hasta obtener una mezcla homogénea.
- Triturar el pan
Vertemos el vinagre y vamos añadiendo el pan previamente troceado y poco a poco mientras continuamos triturando con la batidora.
Vertemos el aceite de oliva virgen extra en forma de hilo y sin parar de triturar con la batidora hasta obtener una mezcla bien ligada.
- Servir el salmorejo
Emplatamos el salmorejo y para finalizar, antes de llevarlo a la mesa, colocamos huevo cocido previamente picado por encima y el jamón serrano troceado o a taquitos.
Otra opción para comer este salmorejo, es untándolo generosamente sobre unas tostadas de pan y colocando por encima el huevo cocido picado y el jamón serrano. Está riquísimo!