Los churros son un tipo de dulce frito originario de España, aunque su popularidad se ha extendido a muchos otros países de habla hispana y también a nivel internacional. Se cree que los churros fueron traídos a España por los moriscos, una comunidad musulmana que habitaba la península ibérica durante la Edad Media.
La tradición de los churros está asociada principalmente a la celebración de las fiestas religiosas, como la Semana Santa y la Navidad. En España, es común encontrar puestos de churros en las ferias y mercados callejeros, donde se sirven como desayuno o merienda.
El método de preparación de los churros es relativamente fácil. La masa se elabora mezclando harina, agua y sal, y se amasa hasta obtener una consistencia suave y elástica. Luego, la masa se coloca en una manga pastelera con una boquilla estrellada, y se va extruyendo en forma de tiras largas y delgadas. Estas tiras se fríen en aceite caliente hasta que adquieran un color dorado y una textura crujiente.
Los churros se suelen acompañar con diferentes opciones, dependiendo del país y de las preferencias personales de cada uno. En España, es común servirlos con una taza de chocolate caliente espeso, en el cual se sumergen los churros antes de comerlos, o simplemente, espolvoreados con azúcar o canela. En otros países, como México, se suelen servir con dulce de leche, cajeta o chocolate líquido, aunque también se pueden disfrutan solos y sin ningún tipo de acompañamiento, pues están realmente deliciosos.
Churros
En esta ocasión, vamos a mostrarte la mejor receta para hacer churros en casa de forma fácil y rápida. Una delicia estupenda para acompañar un chocolate a la taza y darnos un caprichito en cualquier momento del día.
Ingredientes para hacer churros
Cómo se hacen los churros
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Preparación de la masa
Calentar el agua junto con la sal y la mantequilla en un cazo y llevar a ebullición.
Retirar del fuego, añadir la harina y mezclar con una paleta de cocina hasta obtener una masa homogénea.
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Freír los churros
Introducimos la masa en una manga pastelera con una boquilla rizada.
Sobre una tabla de cortar formar los churros y seguidamente, freírlos en abundante aceite caliente hasta que se doren.
Retirar y dejar sobre papel de cocina para retirar el exceso de aceite. Pasar los churros por azúcar y servir.
